VISIONES Y SUEÑOS

Joel 2:28-29

 "Y después de esto, derramaré mi espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. Y también sobre los siervos y las siervas derramaré mi espíritu en aquellos días". Joel 2:28-29

Hoy día, he escuchado mucho acerca de visiones que Dios está dando a loss ancianos, y sueños a sus jóvenes y niños. Los niños profetizan y un derramamiento del Espíritu de Dios sobre sus Iglesias se ha empezado a sentir. Una señal más de los últimos tiempos. Dios, en la Biblia, nos revela que en sueños El ha comunicado a sus siervos eventos que han sido de gran trascendencia en la vida de toda la humanidad. Es muy importante que pongamos atención a toda visión y sueño que tengan nuestros ancianos en las iglesias, y nuestros hijos. Dios está hablando a través de sus siervos y tenemos que estar preparados para recibir instrucciones, o revelaciones por ese medio.
En primer lugar, no debemos tener miedo de las manifestaciones de Dios a sus siervos, mucho menos desestimarlas.
"Después de estas cosas, vino la palabra de Jehová a Abram en visión, diciendo: NO TEMAS, ABRAM; YO SOY TU ESCUDO, Y TU GALARDON SERA SOBREMANERA GRANDE" Génesis 15:1. Dios es nuestro Escudo y Fortaleza en todo tiempo. Tenemos que creer como niños y obedecer a sus mandatos sin temor. El temor no proviene de Dios, sino de nuestro adversario quien cumpliendo cabalmente su misión, se OPONE a la voluntad de Dios y quiere que sintamos Temor, en vez de poner atención y obedecer los mandatos de Dios que se revela a quien El quiere. "Y Habló Dios a Israel en visiones de noche, y dijo: Jacob, Jacob. Y El respondió: HEME AQUÍ. Yo soy Dios, el Dios de tu padre; no temas de descender a Egipto, porque ahí yo haré de ti una gran nación". Génesis 46:2-3. Dios se manifiesta en visiones, y tenemos que estar listos y decir: Heme aquí Señor.

Debemos tener cuidado de no escuchar a todo aquel que diga: Dios me dijo o me mostró en visión tal o cual cosa. Una vez mas, por sus frutos los conoceremos, y siempre tenemos que pedir a Dios que nos confirme cualquier visión o sueño que las personas tengan, pues también el enemigo se mete a nuestros sueños y también hace parodias mentirosas y alucinaciones. ¡Por sus frutos los reconoceremos!
"No envié yo aquellos profetas, pero ellos corrían; yo no les hablé mas ellos profetizaban. Pero si ellos hubieran estado en mi secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo, y lo habrían hecho volver de su mal camino, y de la maldad de sus obras" Jeremías 23:21 y 22
Pero todos aquellos que reciben de Dios un sueño o una visión o palabra, tiene que decirlo y decir la verdad. Muchos dicen "Dios me mostró esto, Dios me reveló aquello" ¡Cuidado! Dios nos ordena: "El profeta que tuviere un sueño, cuente el sueño; y aquel a quien fuere mi palabra, cuente mi palabra verdadera. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? ¿No es mi palabra como el fuego, dice Jehová y como el martillo que quebranta la piedra?" Jeremías 23:28-29.
Una vez mas, la palabra de Dios no necesita que nadie la defienda, ella se defiende sola.
Hermano, hermana yo quiero exhortarte a compartir visión y sueños, y a escribirlos para que otros puedan ser edificados por la palabra de Dios. Ya no tenemos mucho tiempo y necesitamos estar informados. "Y Jehová respondió diciendo: Escribe la visión, declárala en tablas, para que corra el que leyere en ellas. Aunque la visión se tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará". Habacuc 2:2-3

Aprendamos de la higuera la parábola: Cuando la hoja esta tierna es que el verano se acerca.
Jesús viene muy pronto por su Iglesia, y Dios ha derramado su espíritu ya sobre su pueblo. Las señales se han cumplido, el Día del Señor se acerca. (Hechos 2:17-21).

El Apocalipsis se está revelando a los profetas de Dios, y se están cumpliendo cabalmente sus profecías. .
¡La voz de mi amado! He aquí, el viene. Cantares 2:8
Recuerda, los hijos de Dios somos la esposa, y las bodas del Cordero se acercan. ¡Jesús viene pronto!
En su nombre

Adda Vélez